Algunos osados filósofos instan al pópulo a cambiar las maneras de vivir, a cambiar su gobierno como , por ejemplo, han hecho en Cataluña.Son esos que,otrora,tuvieron responsabilidades con gobiernos conservadores y ahora no pueden disfrutar de las dádivas que obtenían.Ahora suenan los teléfonos y reciben ordenes para que, en la medida de sus posibilidades intenten desestabilizar el orden.Y así lo hacen, criticando,creando malestar entre los existentes y culpando a los ahora gestores de lo mal que está todo.Quieren que vuelva lo que antaño les produjo gran bienestar ,a ellos y a unos cuantos más.Aprovechan esta situación de crisis económica mundial para crear confusión en todos los ámbitos de la sociedad.En su empeño llegan hasta enviar mensajes amenazadores a los cargos intermedios para que pongan freno a sus actuaciones y no se consigan logros cotidianos.Recuerdo a los hermanos Malasombra; a los Dalton o al pequeñito gruñón de "Erase una vez...el hombre",siempre pequeñitos y matones.Luego están los de estatura media y esos son los que intentan medrar siguiendo los vanos y pequeños consejos de los que teléfono en mano propagan el planing diario político.Son los auténticos gilipollas,con menos personalidad que un mosquito.Creo que los ciudadanos no son tontos ,como esta gentuza quiere hacernos ver.Por eso intuyo que la gran mayoría no dejará que nuestra tierra, tan castigada por los señoritos, vuelva a tener a caciques.No queremos gobiernos vestidos con trajes pagados por otros.Ejemplos de esos gobiernos y de malas administraciones hay muchos,Valencia,Mallorca,Madrid o Murcia.Aunque dicen que el hombre tropieza dos o tres o cuatro veces en la misma piedra.Bueno la piedra , bien grande ,la tenemos delante de nuestra mirada.Ahora hay que sortearla.
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