" Para evitar las críticas, no hagas nada, no digas nada, no seas nada."




martes, 15 de febrero de 2011

EL PELIGRO DEL INEXISTENTE ENEMIGO

Es el peor de todos conocido.Lo suelen tener aquellos o aquellas que están en lo alto, en la cúspide.Cuando las cosas no salen como quiere empieza a ver enemigos por todas partes.Empieza la desconfianza hacía las personas que tiene alrededor,las peleas,los gritos.Es entonces cuando el que padece la furia del desconfiado comienza a alejarse de sus posicionamientos.Y si antes , por un error ,el proyecto no salió como debiera ahora se repetirá la mala praxis por dejación, por aburrimiento, por cansancio y por la enemistad generada a raíz de la fuerte voz.El desconfiado comenzará a hacerlo casi todo, solito o solita.No se fía ni de su sombra e intentará paliar la situación ofreciendo más horas a su trabajo.Estrés,desesperación,desconfianza,abatimiento y soledad,son los síntomas de esa patología.Busca una receta para aliviar sus males y decide cambiar a sus más inmediatos colaboradores.Piensa que dejando pasar aire fresco se llevará el mal y así lo hace.Recurre a otros conocidos que ,tras pensarlo mucho, le dan el sí.Los otros, esos cuya experiencia adquirieon trabajado a la voz de ya,quedan fuera, relegados al olvido.Comienza una nueva etapa y en el inicio sus nuevos e inexpertos colaboradores cometen el error.De nuevo aparece el grito y la pelea cíclica.No curó bien la enfermedad.Pasó de la receta expedida al efecto.El problema se agrava pero tiene que hacerle frente.Su voz se apaga de tanto forzar las cuerdas vocales.Pasa el tiempo y los oídos de muchos están hartos de escuchar la misma cantinela de forma airada y casi grotesta.Caras serias ante una ira casi demoníaca.La desconfiada voz cae enferma y en la cama, de forma sosegada,reflexiona y decide afrontar el devenir diario de otra manera,infundiendo ilusión a su equipo,trabajando codo con codo y animando a los demás a conseguir un mejor futuro para todos.Es tarde se le acabó el tiempo.Ahora curará la enfermedad junto a la soledad que se aferró a su grito.No acudió a botica para comprar la medicina,esa que le habría dado más tiempo y que se llama confianza.

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