Se acabó la semana de pasión.Para algunos empieza la semana de penitencia,de oración en el intento de que el de arriba les conceda la gracia divina para llegar al poder.Se recoge lo que se siembra,eso es así.Cuando se ha removido la tierra y se ha enterrado la semilla del odio solo puede florecer una planta con muchas ramificaciones odiosas.Eso es lo que comienza a haber en las despensas de algunos.La familia,llegada de visita en semana santa,se marcha.Acabaron con los alimentos almacenados.Ahora ,tras la despedida hipócrita de los derriba despensas,llega el alimento odioso.Ese que hará olvidar los momentos de rezo hasta el año próximo.Será cuando de nuevo se hagan la señal de la santa cruz ante el juez terrenal .Les sentenciará una pena por los pecados cometidos y cumplidas las oraciones quedarán limpios, inmaculados , preparados y dispuestos para sacar la navaja trapera e hincarla de nuevo por la espalda,al que se les ponga por delante.Así funciona esta religión.Es muy parecida a la vida política y social.Ha resucitado el cristo.Algunos regresan a sus lugares de origen, más gordicos.Ya en casa comenzará la operación bikini, de cara al verano.Otros cabeza hinchada, no les sentaba bien el capiruz de nazareno,poco podrán hacer para disminuir el tamaño del solar que Dios les concedió, en su creación.Llegarán las cruces de mayo y cada cual portará la suya.Acabado el mes comenzará la época estival y el que sembró el odio seguirá portando su particular cruz,al menos cuatro años más.
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