No sé hasta donde vamos a llegar con la escalada de precios. Cada día que pasa somos más pobres y nos cuesta demasiado sobrevivir. El precio del combustible se ha disparado al igual que los de la luz y el gas. Muchos alimentos, como consecuencia, experimentan también una subida inalcanzable para el bolsillo de la mayoría.Ante está situación, representantes del gobierno realizan unas manifestaciones que creo están fuera de tono. No se puede invitar a la ciudadanía que tiene un coche de gasolina a que se compre uno eléctrico, si considera que el combustible de su vehículo tiene un precio muy caro. Entre otras cosas porque no tienen dinero para afrontar esa adquisición y porque la energía también tiene un precio desorbitado. Los que realizan esas manifestaciones viven en otro mundo y con salarios muy superiores a los del resto.Tengo la sensación de que muchas veces nuestros representantes del gobierno hablan a lo loco, sin pensar lo que dicen. Lamentable. Ea
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