La obra de adoquinado de la calle Bernabé Soriano, más conocida como la carrera, tuvo un presupuesto de ochocientos mil euros que pagaremos los ciudadanos de Jaén durante mucho tiempo.Ese dinero sale de nuestros impuestos, tasas y demás arbitrios municipales.Fue una decisión de nuestros representantes políticos que tuvo una gran acogida.Una de las principales calles de la capital jiennense se remodeló ,con un trazado moderno,acorde a los nuevos tiempos y alejada, esa era la previsión, de la circulación de vehículos.Los comerciantes de la zona aplaudieron esa decisión .Una calle semipeatonalizada que invitaba al paseo y a la compra.Pasaron los años y los ciudadanos, en su mayoría, decidieron cambiar el ayuntamiento de color.Del rojo al azul y con el cambio desaparecieron ochocientos millones de euros.El coche echó al arcén al peatón.La adoquinada calzada fue ocupada por vehículos pesados que han roto deseos,negocios, el reloj del tiempo y se ha despilfarrado dinero y préstamos bancarios."La carrera" está rota.La calzada, por la cabezonería de unos politiquillos de turno,necesita de otros tantos millones de euros para recuperar la bonita cara que llegó a tener.Son los adoquines rotos con los que tropezamos ,una y otra vez, por la intransigencia de uno o unos cuantos.La calle debe ser arreglada.La cuestión es ¿cuánto tiempo y dinero debemos invertir los ciudadanos de Jaén para contar con esta querida calle en condiciones?.Cuando se vuelva a arreglar ¿ se volverá a permitir la circulación de vehículos pesados como los autobuses urbanos?.Todo depende de nosotros y creo ,sinceramente, que volveremos a tropezar en los adoquines.
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