Es viernes, ¡por fin es viernes!.Se prepara la estampida jaenera.Es un día en el que también se van a celebrar numerosas comidas de empresa.Se afilan los cuchillos y algunos-as hasta con la cucharilla del café intentarán sacarle los higadillos al de la silla de enfrente,metafóricamente, con sonrisa falsa. Son comidas hipócritas en las que ,casi todos, se llevan la puñalada trapera.Un menú caro,con buenos postres y alcohol para que cicatricen las heridas.Tras las viandas y buenos vinos llegará el cuchicheo que se prolongará a lo largo de lo que queda de año y llegado el 2020 todos y todas tan felices para comenzar de nuevo la carrera.Otros andan quitando las piedras que se han tirado, a lo largo de este período, sobre su propio tejado.Intentan que el mal tiempo no ayude a que se caiga el tejado sobre el que se cobijan.Creo que lo tienen difícil, por buenas caras que pongan, la procesión va por dentro.Las luchas internas destrozarán aún más la complicada situación que atraviesan. Izquierda y derecha , miembros de formaciones políticas de uno y otro lado andan a la gresca. Muchos se han colocado bien el espejo retrovisor .Saben que los que dejaron atrás ,tirados en la cuneta,arreglaron los motores y llenaron los depósitos.Circulan a una importante velocidad.Quizás lleguen antes a la meta. Como dice nuestro cantante internacional Raphael, ¿qué sabe nadie?.Ea.
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