Estamos escuchando estos días, durante la campaña electoral para las elecciones locales del próximo día 26 de mayo,muchas promesas y me pregunto si algunas de ellas se cumplirán,una vez los concejales recojan sus actas. Ejemplos tenemos muchos, uno de los últimos el del consejero de economía de la Junta de Andalucía. En una comparecencia informativa reconoció que se no se iba a cumplir una de las ofertas, a cambio de votos, para crear 600 mil empleos.Eso era " un lenguaje, una forma de expresarse durante una campaña electoral ".Ante afirmaciones como estas ,¿quién se cree las palabras de determinados políticos?.Podría preguntarme, por ejemplo, si en los meses de verano, una vez concluido el proceso electoral ,se acometerá el anunciado plan de asfaltado en Jaén capital. Si los que ahora están,dejan de estar,¿quienes ejecutarán ese proyecto?,¿los que no prometieron arreglar las calles y plazas?,¿los partidos que pudieran pactar con la parte contratante de la primera parte?.Los perjudicados volveríamos a ser, de nuevo , los ciudadanos.Es lo que viene ocurriendo, elección tras elección.Cada cuatro años llega el engaño, se ha institucionalizado, y la población lo acepta .Un acto de rebeldía también puede ser ir a votar el próximo domingo y llenar las urnas de papeletas inconformistas.La ciudad de Jaén se merece otro trato,también otros políticos que abran la puerta del progreso a una ciudad anclada en el pasado.
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