¡Cómo cambian algunos políticos cuando llegan las elecciones!.Hasta el más aspero muestra simpatía hacía aquel al que odia.Es una muestra más de la hipocresía que se le adhiere al cargo, nada más ocuparlo. No todos son iguales y por eso quiero resaltar el papel que desarrollan los que día a día se muestran tal y como son,es de agradecer.Aquellos que cambian la tez,según el viento que sople,tienen un problema serio, sobretodo cuando llegan a casa. Son poco creíbles a nivel político y mucho menos en el ámbito personal.Ahora llegan otras elecciones , las locales.Se elige a los representantes de la administración más cercana y quizás por eso llegan las sonrisas a caras políticas que salen a pasear por nuestras calles y plazas.Dice mi vecino que debería haber elecciones todos los años para que no se olviden de la ciudadanía y creo que tiene mucha razón.Una vez que se abren las urnas y finaliza el recuento de votos, las caras vuelven a su ser y se paraliza mucha acción municipal, hasta que de nuevo se aproximen nuevas citas electorales.Esto es posible cambiarlo, claro que si.Nuestro voto vale mucho, más de lo que pensamos.Ya sabemos lo que tenemos en nuestros pueblos y ciudades.Nuestra elección será para seguir así, progresar o para detenernos en el tiempo e incluso retroceder y perder logros conseguidos, con el paso de los años.De nosotros depende.Ea.
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