Entre payasos hay de todo, como en botica.Algunos,solo algunos, son buenos y nos hacen reír sentados frente al televisor.Otros nos hacen llegar su sin gracia o la denominada mala follá granadina y cuando eso ocurre se produce el cambio de canal .Eso bien los saben las empresas que miden las audiencias televisivas.Lo que no entiendo es que, a sabiendas de los malos resultados que cosecharán, se sigue apostando por determinados-as sin gracias.Le deben haber fallado muchos invitados a la producción para rellenar, con tan mala exquisitez, espacios que se supone tienen mucha audiencia. Muy mal está este país cuando la noticia es un payaso.Tenemos muchos problemas a los que se debería dar más tiempo en los distintos canales de radio y televisión. Muchos oídos y ojos ayudarían a solventar las dificultades existentes.Lo contrario ,pan y circo, sirve para entretener al pueblo y que no piense.Determinados sectores del espectro político consideran que una ciudadanía que piensa es peligrosa para sus intereses. Payasos ofrecidos, a ese ideario, hay muchos.Ea
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