Hola,he vuelto. El verano se acaba y una nueva estación nos adentrará en ambientes algo más fresquitos.No obstante firmaría para que el próximo año tuviésemos un estío como este de 2018. El mercurio no ha subido tanto como en años anteriores y los meses ,tradicionalmente considerados veraniegos, han sido más llevaderos.Como siempre Andalucía ha sido lugar de muchas visitas.Málaga vuelve a ser la provincia que más turistas acoge.Es una tierra generosa que ofrece trabajo y placer a toda aquella persona que decide cruzar sus fronteras.Sin embargo cuando alguien rechaza sus encantos tiene complicado un temprano regreso acogedor.No hay color,no se puede comparar con otras provincias andaluzas, por mucho que queramos a la nuestra.Málaga es mágica y sus vecinos unos auténticos privilegiados.Es una tierra de oportunidades que muchos eligen para pasar su vida,aunque en otros lugares del territorio nacional se imponga el vil metal como atractivo para albergar inquietas posaderas.Dicen que solo las personas de corazón bueno y puro pueden ver al mitológico unicornio.Este año se han visto en lugares distintos de esa tierra.No sé si ha sido una campaña publicitaria del ayuntamiento ( @turismodemalaga )o de la Diputación Provincial malagueña ( @TurismoDipMlg ) pero lo cierto es que numerosos turistas han querido acercarse y acariciar a estos animales cuyos cuernos,dicen los lugareños, tenían propiedades sanatorias.Podían curar enfermedades muy peligrosas y mortales.Unicornios que poseían los ingredientes necesarios para alcanzar la eterna juventud.Casi todos los visitantes que los han visto han querido posar junto a esos animales.Olé, por la iniciativa (https://www.instagram.com/s/aGlnaGxpZ2h0OjE3OTYzNjA5MDU5MDYzNjgw/ ).
Málaga vuelve a acariciar la suerte.La ha buscado y la ha encontrado.No es casual tanta visita.El encanto, la magia se respira en sus calles.
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