No es de extrañar lo que está ocurriendo en el partido de Albert Rivera, en Ciudadanos.El viraje ideológico a una derecha más dura,tras su última asamblea, ha originado la salida de una decena de cargos. Abandonan un barco en el que habían puesto sus esperanzas e ilusión ante tanto desatino político.Están conociendo al verdadero Rivera, en su salsa.Aquello de la marca blanca del PP cobra fuerza.Lo que nunca me ha cuadrado es el acuerdo en Andalucía con el Psoe.Quizás por eso ahora,con el cambio de rumbo marcado por el liberalismo del partido naranja,toca apretar las tuercas al gobierno andaluz.Marín, el delegado en Andalucía del partido nacido en Cataluña ,se replantea el acuerdo con los socialistas y surge la amenaza si no se cumplen los compromisos acordados.Incluso no ha descartado pactar con el PP para un gobierno de derechas en Andalucía.Si antes de que llegue Julio no se han alcanzado los acuerdos , sus nueve parlamentarios podrían cambiar de color naranja-rojo al naranja-azul.No me gusta nada esos cambios tan bruscos de ese partido.Son o no son, quizás si pero no.El ejemplo más claro de lo ocurrido con este partido lo tenemos en el ayuntamiento de Jaén, donde tres concejales de C´s abandonaron las siglas,al parecer asqueados,y se pasaron al grupo de los no adscritos.¿Qué harán ahora los ciudadanos que votaron esas siglas en la capital jiennense?.Es el liberalismo puro y duro.Acuden a lo público cuando se hunde su preferido sector privado.Sin embargo sus ideólogos perciben cuantiosos salarios del erario público.Hay que predicar con el ejemplo u no hermano.Así les va.Ea.
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