A Manuel, un vecino de La Guardia, lo han echado casi a patadas de Bankia.Ha ido a protestar por el engaño que ha sufrido su anciana madre.Firmó un contrato-trampa y en lugar de pagar los 24 mil euros ,estipulados en principio,deberá abonar a la entidad 38 mil euros.Manuel ha sido legionario y dice que no tiene miedo a estos sinvergüenzas a los que tapan los elegidos.Señala que en lugar de engañar a pobres viejecitas que lo hagan a ricos acaudalados.La madre de Manuel es una más de las que se confío para ir por el camino que señalaba el que fuera vicepresidente del gobierno del PP y señor de todas las cuentas de las Españas.Pisó la trampa y ahora la herida duele.Tiene que pagar, le dicen los abogados,ya que estampó su firma en el papel.Si no lo hace la entidad financiera acudirá a la justicia y quizás tuviera que ingresar en prisión.Sin embargo el señor de todos lo males , ese que se gastó el dinero en putas, en hoteles,mansiones y coches de lujo, sigue suelto.¿ Lo amarrarán los civiles antes o después de las elecciones generales?,¿habrá pactado u ordenado el gobierno su ingreso en prisión una vez cerradas las urnas?.Son preguntas que me hago, al igual que Manuel y muchos otros.Hemos tenido al zorro guardando las gallinas.
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