El olor a quemado invade pueblos y ciudades de nuestra tierra.Surgen las hogueras aquí y allá,donde menos se lo espera uno.Ha llegado la hora del relevo en los ayuntamientos y los documentos comprometidos que no debe conocer la opinión pública son destruidos, quemados.En los cajones quedarán pocos papeles , solo aquellos que contemplan acuerdos con determinadas empresas a las que se han adjudicado servicios o licencias para acometer proyectos millonarios.También las facturas que dejan los que se marchan y que hipotecarán el futuro más inmediato de los ciudadanos.Eso es lo que se van a encontrar algunos nuevos representantes electos, cuyas aspiraciones son enriquecerse de las arcas públicas.Solo les quedará las recalificaciones de terrenos para que empresas constructoras,afines, hagan negocio a costa de apoyos políticos para otras iniciativas e intereses.La ciudadanía , en general ,es la gran perjudicada con esas actuaciones que solo buscan el beneficio particular y privado.La administración pública al servicio de lo privado.Así son, así actúan los llamadoS neoliberales.Mientras, la izquierda disgregada y desunida...cogiendo moscas.
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