EL PAÍS DE DIGO DIEGO

Si el presidente español se mueve ,según usa los hilos la canciller alemana, a base de austeridad,nuestro país caerá y tendrá que ser intervenido.Así lo cree uno de los más prestigiosos diarios norteamericanos, The New York Times.Señala el rotativo que Alemania ofrece dolor a España en lugar de medicamentos para afrontar el mal.La receta de la austeridad es mala y el diario estadounidense asegura que a pesar de la enorme inyección de liquidez del Banco Central Europeo,el desempleo aumenta y europa entra de nuevo en recesión. Dice el periódico que nuestro país tendrá que hacer muchos más recortes si queremos alcanzar el déficit previsto por Rajoy y que no se alcanzará.Política errática la del presidente español dice el diario ya que recortar en inversión pública hundirá la competitividad económica.Los perjudiciales recortes son fruto de las imposiciones de Merkel que está obsesionada con el déficit y eso hundirá aún más las perspectiva españolas de salir cuanto antes del negro agujero.Los españoles malvivimos del engaño ,de la mentira y sin embargo callamos .De forma dócil asistimos cada mañana o cada tarde a nuestro trabajo diciendo aquello de " virgencia, virgencia que me quede como estoy".Soñolientos un día y otro escuchamos las mentiras oficiales que algunos creen a pies juntillas.Otros duermen y sueñan.De vez en cuando ,sería bueno recordar aquello que nos dijo Calderón de la Barca:

LA VIDA ES SUEÑO

Es verdad, pues: reprimamos
esta fiera condición,
esta furia, esta ambición,
por si alguna vez soñamos.
Y sí haremos, pues estamos
en mundo tan singular,
que el vivir sólo es soñar;
y la experiencia me enseña,
que el hombre que vive, sueña
lo que es, hasta despertar.

Sueña el rey que es rey, y vive
con este engaño mandando,
disponiendo y gobernando;
y este aplauso, que recibe
prestado, en el viento escribe
y en cenizas le convierte
la muerte (¡desdicha fuerte!):
¡que hay quien intente reinar
viendo que ha de despertar
en el sueño de la muerte!

Sueña el rico en su riqueza,
que más cuidados le ofrece;
sueña el pobre que padece
su miseria y su pobreza;
sueña el que a medrar empieza,
sueña el que afana y pretende,
sueña el que agravia y ofende,
y en el mundo, en conclusión,
todos sueñan lo que son,
aunque ninguno lo entiende.

Yo sueño que estoy aquí,
destas prisiones cargado;
y soñé que en otro estado
más lisonjero me vi.
¿Qué es la vida? Un frenesí.
¿Qué es la vida? Una ilusión,
una sombra, una ficción,
y el mayor bien es pequeño;
que toda la vida es sueño,
y los sueños, sueños son.

Pedro Calderón de la Barca, 1636-1673