EL COLCE DE LOS SANCHISTAS

Dicen que en esta vida todo se paga, lo bueno y lo malo. Algunos representantes políticos empiezan a tomar nota porque saben lo que se les viene encima. Otros-as deberían seguir el ejemplo de los concejales del Ayuntamiento de Linares. A instancias de su alcalde sus salarios se verán reducidos un 20 por ciento. Sólo con esa iniciativa el municipio tendrá un ahorro de 115 mil euros. En otras corporaciones, con la que está cayendo, se suben los salarios. ¿ Secundarian esa iniciativa los concejales del Ayuntamiento de Jaén?. La capital no está para tanto dispendio porque si su trabajo sirviera para algo podríamos pensar que igual se merecen cobrar a final de mes. Sin embargo, la ciudad languidece, el desempleo está desbocado, se cierran comercios y se despide a trabajadores del consistorio que gastaban su dinero en tiendas de nuestro entorno. Están arrasando, dicen los lugareños, con lo poco que había en este secarral jaenero. A esta crítica situación se suma la guerra interna que existe en el seno del partido que sustenta los gobiernos de la mayoría de ayuntamientos, el PSOE. Así lo creen muchos, entre ellos el vicepresidente de la Junta de Andalucía, Juan Marín. El otrora socio de los socialistas en el anterior gobierno autonómico da a entender que esa lucha entre susanistas y sanchistas ha llevado al gobierno central a decantarse por la ubicación de Córdoba para instalar la base logística del ejército de tierra. La ejecutiva socialista de Jaén sería seguidora de Susana y contraria a los postulados de Pedro al que no apoyaron en su debido momento. La venganza en plato frío se ha servido. Los perjudicados han sido los ciudadanos de esta provincia que tan buenos resultados ha proporcionado siempre en las urnas al PSOE. Ahora parece que la ciudadanía ha despertado y se ha encontrado con lo que han hecho sus representantes políticos. Mejor dicho, con lo que no han hecho a lo largo de muchos años en los que han estado cobrando grandes salarios mientras nos devolvían engaños y falsas promesas. Ea.